Eres responsable de ti mismo
Las Mujeres
105. Te hemos revelado el Libro (el Corán) con la verdad (¡oh, Muhammad!), para que juzgues entre los hombres según lo que Al-lah te ha enseñado. Y no defiendas a quienes se traicionan a ellos mismos (ocultando la verdad y mintiendo sobre ella)[158].
106. Y pide perdón a Al-lah (en todas las situaciones); ciertamente, Al-lah es Indulgente y Misericordioso.
107. Y no defiendas a quienes se traicionan a sí mismos. Al-lah no ama al traidor pecador.
108. (Los hipócritas) ocultan a los hombres (sus malas acciones) pero no pueden ocultárselas a Al-lah, pues Él está con ellos (a través de Su conocimiento) cuando conspiran por la noche con palabras que no son de Su agrado. Y (el conocimiento de) Al-lah abarca todo lo que hacen.
109. (Algunos de) vosotros los defendisteis en esta vida, pero ¿quién los defenderá ante Al-lah el Día de la Resurrección? ¿Quién los protegerá?
110. Quien obre mal o sea injusto consigo mismo (por sus malas acciones) y busque después el perdón de Al-lah hallará que Al-lah es Indulgente y Misericordioso.
111. Y quien peque, lo hará en perjuicio propio; y Al-lah es Omnisciente y Sabio.
112. Y quien cometa una falta o peque y culpe a un inocente de su pecado cargará con su calumnia y con un pecado flagrante.
113. Y si no fuera por el favor y la misericordia de Al-lah sobre ti (¡oh, Muhammad!) un grupo de ellos (quienes se traicionan a sí mismos) te habría desviado de la verdad, pero solo se desvían ellos mismos y no podrán perjudicarte en nada. Y Al-lah te ha revelado el Corán y la sabiduría, y te ha enseñado lo que no sabías; el favor que Al-lah te ha concedido es inmenso.
114. La mayoría de las conversaciones privadas[159] no aportan ningún bien, a menos que alguien promueva la caridad, una buena acción o la reconciliación entre los hombres. Y a quien así actúe buscando la complacencia de Al-lah, le concederemos una gran recompensa.
115. Y a quien contradiga al Mensajero (y se oponga a él) después de habérsele mostrado la verdad y no siga el camino de los creyentes, lo dejaremos que prosiga en el camino que ha tomado y haremos que arda en el infierno; ¡y qué pésimo destino!
116. Ciertamente, Al-lah no perdona que se adoren a otros fuera de él, pero perdona el resto de los pecados a quien quiere. Y quien adore a otros fuera de Al-lah se habrá extraviado lejos de la verdad.